sábado, 3 de abril de 2010

Policías estatales fueron ‘levantados’; los encuentran muertos

"Quieres que te de un norte, el narco esta en Coahuila"

Estaban en un negocio de gorditas, ubicado en la carretera a Mieleras, cuando unas personas armadas les ordenaron salir del lugar, y los obligaron a subir en vehículos cuyas marcas se desconocen hasta el momento

Torreón, Coahuila.- Hombres encapuchados y armados asesinaron a balazos en la cabeza a dos agentes de la Policía Estatal, luego de que fueran desarmados y ‘levantados’ cuando se encontraban en un negocio de gorditas denominado ‘Pamela’, ubicado rumbo a la carretera a Mieleras.

De acuerdo a fuentes de la Fiscalía General del Estado, a las 14:45 recibieron una llamada anónima informando sobre dos cuerpos tirados en la carretera a Mieleras.

En base a las investigaciones posteriores, se precisó que los fatales acontecimientos tuvieron lugar hoy a las dos de la tarde, cuando de forma sorpresiva, varios sujetos fuertemente armados entraron al establecimiento de comida, quienes amenazaron a las personas que se encontraban en el lugar y las obligaron a tirarse al suelo.

Antes de que esto sucediera, los encapuchados ya tenían inmovilizados a los policías estatales, quienes fueron despojados de sus armas en el lugar donde se disponían a comer, dejando a los comensales y cocineros, nerviosos y atemorizados por el acontecimiento que acababan de presenciar.

Las personas armadas ordenaron a los agentes estatales a salir del negocio de gorditas quienes fueron obligados a subir en vehículos cuyas marcas se desconocen hasta el momento y donde se cree, fueron asesinados en el interior de dichos automóviles, para luego tirarlos muy cerca del lugar de donde fueron ‘levantados’.

Uno de los cuerpos correspondía al del agente Wilder Alejandro Mota Hernández de 29 años de edad, quien fue encontrado sin vida en el kilómetro 8.5 de la carretera a Mieleras y, el otro, al del policía Osvaldo Samaniego de 28 años, quien estaba a un kilómetro de diferencia de su compañero. Se informó que los dos agentes estaban en servicio, cuando sucedió este fatal acontecimiento.

Los policías perdieron la vida a balazos en la cabeza presumiblemente con armas de grueso calibre, pero esta información, así como el número de impactos que recibieron cada uno en esa zona del cuerpo, aún no se ha precisado, ya que al cierre de esta edición todavía no estaba el resultado de la necropsia de Ley.

Los elementos estatales realizaban acciones de patrullaje y vigilancia a bordo de la patrulla con el número económico 6674, la cual fue resguardada por el personal de la corporación policiaca a efecto de las investigaciones posteriores.



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